Claves para tu entrenamiento de musculación


Sabemos que es duro entrenar, sabemos que es duro progresar, pero también sabemos que es muy fácil dejarlo todo y darse por vencido. Pero espera, no desistas, porque te vamos a dar las claves para que sigas entrenando con la máxima intensidad y motivación.

Seguro que más de uno de los que me leéis habréis sentido esa sensación de frustración e impotencia al ver que no progresas en ningún sentido, crees que lo que haces no vale la pena y solo pierdes el tiempo. Pues descuidad, ¡aquí os dejo algunas claves para que no bajen esos ánimos!

Constancia. La típica, pero no nos cansaremos de repetirlo. Se constante, sigue tu rutina, márcate un tiempo que dediques al gimnasio, y se cuidadoso y escrupuloso con esto. Sin constancia, no llegarás lejos.

¡Tienes que tener la mentalidad de querer arrasar cada vez que
entras por la puerta del gimnasio!
Márcate objetivos. Marcarse unos objetivos, y escribirlos en una pizarra en la pared de tu habitación, hará que cada vez que te levantes lo veas y sepas cuál es tu objetivo, tu misión, por lo que luchas. No escribas "perder peso", o "ganar volumen", sé claro contigo mismo, márcate objetivos específicos, "perder 5 kilos en 4 semanas" o "aumentar mi masa muscular en 4 kilos en 2 meses". Debemos saber por lo qué vamos a trabajar.

Explora tus límites. Cuando decimos esto no significa estar constantemente yendo al límite, ya que esto puede ser lesivo y peligroso pero, ¿por qué no pruebas un día a hacer un curl de bíceps con 5 kilos más, o colgarte peso en las dominadas? Prueba algún día, y comprobarás que a veces, el miedo nos hace creer que no somos tan fuertes como realmente es.

El miedo a veces puede mermarnos
psicológicamente.
Sé paciente. Todo llega, con el esfuerzo y el trabajo. No te obsesiones con que si lo consigues o no, las cosas no suceden de un día para otro, tarde o temprano, si eres constante, serás recompensado. Olvídate de obsesiones, de prejuicios, tú único objetivo es el de entrenar mejor cada día.

Vuelve a tu infancia. Como lo oís, una de las claves es volver a ser un niño. ¿Por qué? Simple, los niños comen sano, se van a la cama pronto y se echan siestas, vamos, lo que hace un culturista en su día a día.

Cambia de compañero. Realmente, buscarse un compañero debe funcionar como estimulo, y nunca debe servir como placebo. Hay veces en las que caeremos en la misma rutina, y no estaremos tan motivados como antes, por lo que probablemente nuestro compañero esté en la misma situación. Solución: busca un compañero más fuerte, cambia de aires, verás como esto hará que reacciones tanto tú como tu cabeza.

Mejor prevenir que curar. Es decir, toma medidas antes de entrenar para evitar males mayores. Estira antes y después de entrenar, descansa lo suficiente, haz visitas al fisio, date masajes musculares, etc. Mímate y tu cuerpo te lo agradecerá.


Siguiendo estas claves, estoy seguro que poco a poco tu cuerpo irá mostrando esos esfuerzos que estas haciendo por él.

0 comentarios:

Publicar un comentario

¿Qué opinas?